Tocada ala

Los ángeles dieron la fe y sus alas

Por ofrecerte la alternativa al sueño eterno;

Pasarán tantas y tantas veces en mi cabeza,

Las horas muertas que recuerde

Tu nombre a ciegas y en silencio,

Nadie sabrá jamás tu nombre, el de mi recuerdo.

Pensaré la manera de hacer,

Todo aquello que tú anhelas, pensaré

La manera de hacer para que vuelvas.

Ayer, en la noche junto al río,

Divisé en la orilla el inicio del frío,

Supe, desde ese mismo instante que tu

Eres lo que yo tanto he estado esperando,

La ilusión de un comienzo perfecto

Lejos del mundanal ruido humano.

Si tan sólo, por un beso tuyo,

Barco que navega a puertos

Desconocidos aún para mí,

Diera yo algo en la vida,

Daría la vida misma

Desde el mismo instante

En que tu boca y mi boca

Se tocaran lentamente

Como las cortinas dormidas que

Acarician la media luna de plata,

Bautizándome en ti,

Como única religión que proceso.