Cuando te quedas vacío

Sandwiches de atún, mahonesa y pimiento rojo. Pies doloridos y palpitantes plantas como fuego cardoso. Me duelen a reventar estos pies míos que a tantos sitios me llevan; me duelen tanto como a veces el alma pero no tanto como eso. 

A pesar del sufrimiento me siento como los esclavos que recogían algodón en los campos extensos de los viejos estados unidos; canto para no llorar, río para mi ansiedad sofocar y al final, cuando te quedas vacío en casa frente al ordenador escribiendo se te queda el tiempo parado buscando una excusa para continuar agonizando.

Los comienzos son duros me repito una vez tras otra, toda esperanza despega desde el esfuerzo que me autoexijo; no es fácil complementar dos trabajos (porque un tercero que es hacer durante dos horas llamadas un día a la semana no es un trabajo, es una colaboración más bien). 

Me pregunto por qué llevo las dos cosas adelante; por ahora es más el sufrimiento añadido que el beneficio posterior, a parte sea dicho de la insensibilidad proveniente de la manía severa... hay cosas que no entenderé, "feos" y discriminación que a veces no se entienden... La verdad, seas quien seas el que está leyendo esto no pretendo que me entiendas, sólo quiero soltarlo aquí, mientras lo entienda yo es suficiente, aunque el que sepa lo que vivo lo intuirá.

Yo vine aquí cargado de ilusiones renovadas por una nueva etapa; ahora me encuentro en una evidencia notoria sempiterna y apesadumbrada; que pena, con lo bien que prometía este año, han pasado 4 meses y aún me sigo preguntando si merece la pena tener que aguantar gilipolleces y estupideces de los demás para mantenerme lejos de un sitio en el que no hay oportunidad de nada.

No volveré a casa por navidad, no sé cómo será sinceramente, si me dará pena o no, si derramaré alguna lágrima o no (ya es imposible creo yo, interiorizo tanto todo que ni una sale). Me perderé la noche buena, la navidad, la noche vieja, el año nuevo, la víspera de reyes, los reyes y mi cumpleaños.

Mi cumpleaños es algo que siempre me ha jodido, no hay nadie, nadie se preocupa de reunir a nadie para darte una sorpresa, no encuentras más que comentarios en redes sociales y poco más... no hay rastros de humanidad en mi, salvo trabajo, esfuerzo y voluntad. Lo demás todo ha terminado conmigo.

Aún así, sigo luchando por una mejora, por una idea o una ilusión que me ayude a tirar a delante; no suelo rendirme nunca. Hay otra cosa, el intentar rehacer mi vida sentimental; no puedo, no encuentro a la mujer, la candidata, o si encuentro hay algún tipo de barrera o complicación. Mi vida ahora mismo es perfecta tal y como está, no echo de menos a nadie, no necesito a nadie, estoy yo sólo conmigo mismo y sin desvaríos, todo está bajo mi control y me siento que tengo el control de algo.

Sé que algún día encontraré a esa mujer.