Oración de velas rojas


Dulce nombre,
Dulce oración del hombre
Que te contempla,
Eras un invierno que
Se convirtió en primavera.

No sé qué decirte o ver hacerte,
Para que sepas que este
Amor es verdadero,
Que constantemente andas
En mis pensamientos, ante
El sobrante de las palabras
Y la falta de tus momentos.

Ante mi vela en el relicario,
Aferro fuertemente mi rosario
Pidiendo a dios una obra,
Un milagro, una clarividencia
En tu mente que a las dudas
Comience espantando.

Canto desesperado, amor
Grotesco, mundano,
Humano, demasiado humano,
La piel me quema y el alma
Se me fue volando,
Es la intensidad que oprime
Mi corazón envenenado, solo
Mi sed puede apagarla
El contacto incipiente de
Nuestros húmedos labios.

Hay una cosa que comprendí
Al conocerte,
Que siempre hay vida
Después de la muerte.
M.C.D.N.

Comentarios

Entradas populares