Las cosas que valen lla alegría

Las cosas que valen la alegría, son aquellas que se recuperan con esfuerzo y dedicación. Tras horas y horas de fallo, dar con la fórmula secreta, dar con alguna pista... sin saber realmente, teniendo en claro una sola cosa... no hacer sufrir.

En cuerpo y alma, cambiar el chip de manera radical, ser la semilla del cambio a sabiendas que la empresa es difícil pero con un inherente entusiasmo que hace que la lucha más ardua se convierta en un escenario.

Las cosas que valen la pena ya no encajan en este cuadro, las cosas que valen la alegría es el bien necesario por el que hay que luchar y dejar de lado lo ordinario rudimentario calamitoso y despiadado que ensombrece el alma del hombre y que solo hace daño.

Luchar, encarnizadamente por el amor, luchar, apasionadamente por todo lo que el mundo significa para dos... luchar, aunque todo este en contra y nada favorezca... Yo soy el viento, que embiste a la mar salada, me llaman la roca afilada... donde mueren todos los lamentos y el mal se acaba.

Aqui me he desprovisto de toda fragilidad, más fuerte que nunca, mas bravo que siempre, con mas alegría que el ruiseñor que despierta al alba... por nosotros, por ti primero y por mi dudas e inseguridades que a veces dan tanto miedo.

Te quiero.

Luchar por ti, por nosotros, por nuestro mundo de besos y abrazos un domingo cualquiera... por ti, aunque me muera, por ti, sin mas pena, por ti, por la alegría, por las cosas que merecen la alegría.