Bosque Espeso


Vivir bajo una segunda piel,
Sentir nacer los bellos de mi cuerpo,
Resurgir palabras encerradas
Que divagan en el desierto;
Todo sepultado en mi prisión
De acero, cristal fino,
Pudo serlo, nada afectará
A mi corazón enfermo;
Vivo protegido sobre mi hiel bífida,
Esa que vino a contar mentiras,
Que volvió de muy lejos
Para saber si podía todavía
Internarse en el bosque seco
Para destruir más alegrías.

Comentarios

Entradas populares