La muerte no deja de rondarme

Cada vez te pienso más

y te conviertes en una constante,

no puedo dejarte

pero me consumes como una idea incesante.

¿Qué si dejara de respirar unos días?

sino hubiera que nada me preocupara,

que no enturbiara mi alma

yo podría sentir la paz,

podría sentir la fría arena bajo mis palmas

moldearla y construir castillos en la playa.

Los días están más cargados,

el alma pesa como una mochila a cuestas

y cada noche 

soy más sincero

no puedo con esto porque me muero.

No deja de rondarme ni un momento

la muerte que tanto espero;

estoy tan cansado ya

que esta estación me apeo.

Quiero morir en tus brazos,

quiero gritar en silencio

me encantaría que fuera mayo

para sentirte de verdad y de nuevo.

Estoy deseando que vuelvas,

que todo pase,

pero desde aquí te digo

que no volveré a pasar por esto

porque queda demostrado

que el amor no es como un chicle

que lo estiras hasta donde llegue

porque tu amor y el mío se está rompiendo

de tanto estirarlo.

No se puede ser tan egoísta 

si de verdad nos importan los demás

porque si estamos seguros de seguir haciendolo

es que sólo nos importamos nosotros mismos, señal.

No estires más lo que es fiel y sincero

y empieza a preocuparte por lo eterno, 

que lo pasajero ya se irá

que eso es sólo momentos

valora lo que tienes para luego

no caer en el arrepentimiento.