Naturalezas distintas

La mayoría de veces no sé como comenzar una entrada; empiezo a escribir en este huequito y luego borro unas 14 veces antes de escribir la definitiva, hasta que cojo y aburrido dejó la última que no tengo ganas de borrar por decimoquinta vez.

Mi ex pareja y yo hemos finalizado la relación; somos dos naturalezas distintas en una misma selva; no hemos terminado mal pero si friamente; no mensajes, no llamadas, no noticias, para así poder los dos salir adelante con el apoyo de los que nos quieren. Una pena por todo el empeño puesto en la relación pero un alivio para ambos el ahorrarnos la infelicidad que teníamos, presos de una vida que ninguno de los dos deseaba. En navidades nos veremos supongo, para sentarnos, vernos y alegrarnos de que las cosas nos van bien por separado.

Esto me ha servido para ver que tras una relación se puede terminar bien, aunque ahora mismo no hablemos o no estemos en contacto; yo creo que cuando se calme el agua el barco podrá salir a navegar. Sea lo que sea en su vida que le pase bueno me alegraré y espero ser el primero en felicitarla por sus éxitos.

Por mi parte estoy bien, creo que ambos hemos sentido estos últimos meses como una carga y como una cobardía por no poder finalizar antes la relación como tendríamos que haber hecho; creo que había un miedo extraño en nuestras vidas, una ciudad común, un contexto común y la necesidad de tenernos el uno al otro para cuando todo iba mal.

Me alegro de que hayamos acabado con eso y emprendamos nuevas aventuras en nuestras vidas, seguramente el destino tiene grandes cosas para nosotros, y esta relación que ha caído bajo los pies del silencio nos sirva para reflexionar y ser mejores con el siguiente o la siguiente que llegue a nuestras vidas.

Pienso por una parte en ella, preocupación por si está bien; sé que es fuerte, que le dolerá igual que a mí, pero estará bien porque tiene a dos angelillos por ahí que la cuidan magnificamente y que se portan bien, así que está en buenas manos.

Por mi parte, cómo me siento no es una incógnita; aliviado tras tanta lucha que hemos tenido, desentoxicándome porque es difícil pasar de estar pendiente de alguien a no estarlo, de dos años de relación a dos semanas de silencio o cero presencia. 

La vida es así no? todo tan volatil, tan efímero de pronosticar. Estaremos bien seguramente. 

Ambos  hemos sido dos animales metidos en una jaula, ahora en el aire libre estoy seguro que disfrutaremos de nuestra libertad en naturalezas distintas, tan parecidas en el fondo que mirarlas a la cara asusta.

Esto es todo por hoy, a ver si me animo y sigo escribiendo un poquillo más.

Un saludo a todos lectores