Todo es muy frío

No dejo de pensar en que frío ha sido; que sí que es lo mejor; que sí que nos hacíamos mucho daño juntos; que sí a todas esas cosas que los dos sabemos de sobra. Creo que ahora es cuando me doy cuenta, cuando han pasado ya días y su ausencia sólo la lleno yo.

¿Si la echo de menos? Pues sí, cuesta mucho decir adiós de golpe, cuesta mucho dejar todos esos sentimientos a un lado y no mostrar ninguna emoción al respecto. ¿Cómo estará? ¿Sufre a su manera? Tal vez, también tiene que dolerle pero... ¿A que estás mejor así?

Yo me lo noto, me noto diferente porque el cambio es muy nuevo; la he amado muchísimo, quizás ahora mismo la siga amando, y mi corazón es un mentiroso porque algunas veces me da un vuelco cuando veo que no está. Pero  la realidad es bien definida, nos hacemos daño, nos restamos libertad, estamos quemados de intentar e intentar y nunca he sido de tiempos, es mejor zanjar y dejar pasar, pero coincido con ella en una cosa, nos hemos querido mucho y no debemos de dejar de tratarnos.

¿Si le deseo lo mejor? Sí, seguramente, con todas mis fuerzas; sonrio cuando la imagino feliz, veo su cara con la sonrisa y el cuerpo de un hombre sin rostro, rostro que ella le pondrá cuando elija a su hombre; ojalá ahora no se desloque, sino que se centre, que piense, porque no hay otra cosa este mundo que yo más quiera que le vaya bien para siempre y sea feliz de verdad.

Nosotros no seríamos felices, es un hecho contrastado que no dejo de repetirme entre silencios, entre idas y venidas abstractas; nos peleamos, nos malhablamos, nos faltamos al respeto... ¿dónde han estado los límites? Cuando quieres tanto a alguien, eres capaz de dejarlo libre cuando ves que no es feliz, eres capaz de repudiar todos esos sentimientos y egoísmos, admites la derrota y para dos personas que nunca se rinden con nada, duele, duele más la derrota quizás que el perder a alguien para siempre... aunque la intención es por lo menos ser colegas.

No pienses que no pienso en ti; sé que lees y que visitas esto alguna vez, no vuelvas más por aquí porque ambos debemos superarlo; es un gran esfuerzo no cortar en seco, es un gran esfuerzo hacer las cosas civilizadas porque lo fácil sería eliminarse de todo contacto... Escúchame, no hay más palabras de amor, ni tristezas, no hay esperanzas ni perdones, no hay nada; tan solo el inmenso vacío que supone no tener ya a nadie; antes ese alguien era para compartir algo, se convirtio en alguien para pelear y desahogarse.

¿Nos volveremos a ver de nuevo? Quizás nuestros caminos no estaban destinados pero quiero que sepas que me llevo lo mejor de ti, lo mejor que me has dado y lo bueno. Lo malo ya se me ha olvidado y no hay rencores, tan sólo razones para dejar que corra el tiempo y encontrarnos en otro momento, por casualidad, sin dilaciones. 

Te deseo lo mejor.

Nico

Comentarios

Entradas populares