El tiempo perdido

Hoy me río al ver 4 visitas de las estadísticas de este blog, de cuatro países distinto a la misma hora y el mismo post... me río por el simple motivo de que la cosa es poder hablar de un tema como si yo hubiera hecho algo; es mejor pensar en lo malo que uno hace en dos años y poco de relación que se acumulan haciendo que se tomen las decisiones.

Podría enumerar mil cosas, decirlas, vaciarme pero he optado por otra forma de actuar, el olvidar lo malo, perdonar todo (lo conocido y lo desconocido...) y seguir adelante. Me planteé en su momento una visita navideña... me di cuenta de que no merecía la pena, primero por la predisposición (1 familia, 2 amigos) y a parte por las ganas de pelea. Una de las cosas que más presiento es la predisposición que tiene la gente hacia ciertos temas y sus sentimientos al respecto... para dar por culo vamos y como que no tengo yo ganas de aguantar gilipolleces.

Por eso digo que tras ver esas cuatro visitas, tras imaginarme todo el entramado de dires y diretes típico... hay que madurar, saber encajar las cosas, asimilar y hacer cuenta de todo lo que llevo a esa situación. Analizar el egoísmo, la inmadurez, la testarudez, la contradicción constante, etc, Yo he comprendido por fin tras pasar por un arduo camino la locura que me desestabilizaba y yo perdí el equilibrio porque me dejé llevar soberanamente por la actitud de una persona. A día de hoy puedo decir que no daría tanto si no es merecido y yo he hecho demasiado por una persona que no ha merecido tanto aunque yo creyese en aquel momento que sí... cuando he hecho cuenta durante ese letargo al que he estado sometido recapacité muchísimas cosas, gestos, etc que me mostraron que hice mucho por querer sacar algo de alguien que no daba más.

Cometemos errores, aprendemos de ellos, maduramos, tenemos épocas en las que debemos pararnos a pensar, reciclarnos para hacer una profunda reflexión exenta de opiniones; la vida, las personas, las relaciones son así, aprendizaje por ensayo error. Lo que sí es que nadie pagará por los errores de otros y que con ilusión y esperanza encararé de nuevo el amor cuando aparezca.

No guardo rencor a nadie de mi vida anterior y deseo lo mejor; a mí lo que me deseen, digan o hagan me puede resbalar por la bolsa que acumula el líquido creador de niños... Pero yo siempre estaré con una sonrisa y mi mejor predisposición.

El tiempo perdido no es recuperado pero sí invertido; como dije, aprendemos por ensayo error pero cometemos el error de juzgar a personas nuevas por los fallos de otros... espero que no me pase porque con el tiempo personas que llegan nuevas a nuestras vidas cambian, se vuelven la otra persona y las paranoias que creamos entorno a ellas se vuelven ciertas.

Amar, esa palabra, debe ser como la practican los niños, sin mirar condición, sin poner etiquetas, sin prejuzgar; Yo cuando vuelva a amar será así, con la ilusión de un niño... pero con la experiencia del hombre que ya ha recorrido un camino.

A aquellas personas que siguen leyendo mi blog por motivos personales os invito a hacer como yo, a pasar página, a quedarse con lo bueno y no guardar rencor. Cuando las cosas se deciden y se hacen así es porque se creen que son lo mejor, yo todo lo que hice en mi vida lo hice porque pensaba que era lo mejor en ese momento y como en mi vida mando yo, así queda. Te invito a no visitar mi blog, a no estar pendiente de mi historias y pasar página. La vida sigue, el daño esta hecho, sólo queda recuperarse y reflexionar para no volver a cagarla con otra persona que nos ame.